Internet no descubrió las redes de trabajo colaborativo para conseguir una causa común, las potenció. Prueba de ellos son las redes sociales para financiar proyectos, desde Kickstarter hasta Goteo, cada una de ellas lleva a la Red prácticas comunitarias ancestrales como la vaquita, el bote, la tanda, para alcanzar metas económicas. El modelo es tan bueno de por sí, tan horizontal y de beneficio para todos los participantes del proceso, que las plataformas de financiación colectiva (crowdfunding) comenzaron a abundar con especializaciones, para educación, ciencia y, tal es el caso...
Según nuestros analistas económicos, los jóvenes españoles tienen problemas para acceder a sus viviendas porque se niegan a trabajar y el poco dinero...