Uber suspendió las operaciones durante tres meses en el estado por la estricta regulación de las autoridades y han empezado las manifestaciones para lograr el regreso de la compañía a Cancún.
Más problemas para Uber en México. En menos de una semana, el servicio de transporte ha finalizado sus operaciones en Campeche por los problemas que han tenido con la ley estatal y también han abandonado Cancún, donde libran una batalla desde principios de año. La Ley de Transporte de uno de los lugares más turísticos del país considera la plataforma como un servicio pirata y la compañía denunció anteriormente la "cacería" contra los vehículos, los cuales fueron detenidos en numerosas ocasiones por las autoridades.
A la espera de que el Congreso de Quintana Roo apruebe una Ley de Movilidad que regule las plataformas digitales, Uber decidió suspender sus operaciones en el estado durante tres meses. La compañía esperará a que se apruebe una "regulación incluyente" para volver a operar en Cancún, donde cuenta con más de mil socios conductores.
La medida tomada por Uber fue considerada una victoria por el Sindicato de Taxistas Andrés Quintana Roo, que afirmó en un comunicado que la salida de la plataforma es un "importantísimo logro de la administración sindical". Sin embargo, muchos ciudadanos de Cancún han visto esta medida como algo muy negativo y se manifestaron para pedir una regulación que logre la vuelta de Uber al estado.
En total, unos 100 conductores de la compañía formaron parte de la marcha, en la que denunciaron que se quedaron sin trabajo por no haberse aprobado una ley que regule de manera correcta servicios como el de Uber. Por otro lado, critican que la ley que pretendía aprobarse en Cancún cuenta con varias limitaciones que dificultan las operaciones de la plataforma. El pasado mes de noviembre, el Congreso del estado propuso una regulación que, aunque era muy esperada por Uber, les provocó más problemas.
La regulación obliga a los conductores a contar con vehículos que tengan un valor mínimo de 220.000 pesos y no más de cuatro años de antigüedad. En la protesta, muchos conductores afirmaron que han adquirido nuevos automóviles pero que estos no superan los 180.000 pesos, por lo que no podrían trabajar en la plataforma según la propuesta de ley.
Por otro lado, la regulación prohibiría los pagos en efectivo una medida que, junto con los requisitos para ser socio conductor, "van en contra de los principios de la economía colaborativa", según Uber.
Los manifestantes denunciaron también que las autoridades no habían logrado una mejor regulación por la presión de los taxistas, quienes han intentado acabar con el servicio de transporte privado desde que llegó a Cancún.
El problema que tiene Uber en el estado no es nuevo y en otros lugares de México ha enfrentado conflictos legales similares además de la oposición de los taxistas para que la plataforma opere. Sin embargo, Cancún es uno de los estados más turísticos del país y la presencia de la compañía en el estado es de gran relevancia.
La primera manifestación ha tenido lugar poco después de que Uber anunciara la salida temporal de estado. Según los presentes, esta será solo la primera de muchas protestas para conseguir que la compañía tenga las garantías legales para poder ofrecer sus servicios en Cancún. El Congreso pretende aprobar la ley en el primer trimestre de 2018, momento en el que se decidiría el futuro de Uber en uno de los estados más estratégicos de México.
