Tecnología »

Discutir  | Enterrar | Tagged: anlisis samsung galaxy tab pro realmente puede una tablet servir para trabajar Add To 
Bookmark and Share
Hemos probado la nueva Samsung Galaxy Tab Pro 12.2". ¿Es posible trabajar realmente con ella? ¿Qué tal cumple? Lo desvelamos en nuestro análisis a fondo.Hay un punto en la historia de la electrónica de consumo que marcó un antes y un después para la industria y para la forma en la que los clientes finales consumimos los contenidos de la red. Fue la presentación del primer iPad, en enero de 2010. No era la primera vez que un fabricante intentaba algo similar. La propuesta de una gran pantalla táctil conectada a la red en la que ver y manejar información venía de lejos. Microsoft fue quien más insistió, y eso que lo hizo poco. El concepto, erróneo de base: un armatoste con un sistema operativo de escritorio que al final del día no tenía ningún atractivo ni utilidad real. Nokia también creó algunos prototipos, y por suerte para ellos, ahí se quedó, en prototipo nunca comercializado. Apple dio en el clavo: una pantalla capacitiva a medio camino entre ordenador portátil y smartphone con un sistema operativo móvil: más ligero, más sencillo y orientado al consumo de contenidos. Porque eso es lo más fuerte que hemos visto en las tablets hasta la fecha: una forma sencilla, bonita y versátil de consumir contenidos. Y ahí ha quedado relegada la figura de la tablet en la mayoría de los casos: a leer, a ver, a escuchar; pero no a escribir, a diseñar, a componer. En el ámbito profesional, más de lo mismo: una tablet sirve para ver la información que se recibe o para editar pequeños ajustes, pero no para rellenar interminables hojas de Excel o para elaborar largos informes. Samsung, que tendrá lo que tendrá pero supo ver un mercado para smartphones de gran pantalla como el primer Note, ha apuntado ahora a este vacío: con la etiqueta Pro, quiere demostrar que una tablet también puede ser concebida para el entorno profesional. La siguiente pregunta es la de siempre: ¿cuál es el resultado?##Pantalla Lo primero que llama la atención de la pantalla de la Galaxy Tab Pro de 12.2 pulgadas es su tamaño. Es un rara avis en el mercado de tablets, ancladas en las 10 pulgadas de los modelos más grandes salvo pocas excepciones. ¿Qué tal sienta una pantalla de 12.2 pulgadas a una tablet? En primer lugar, es genial para ver películas, ver vídeos de YouTube o incluso para jugar. La experiencia es mucho más inmersiva. En otros casos de uso, se agradece el tamaño para mostrar más información simultánea. Pero en general, se hace grande. Grande para manejarla, grande para transportarla, grande para sacarla y meterla en una mochila, para consultar información puntual... [caption id="attachment_173006" align="aligncenter" width="800"] Samsung PenTile: Back to the Future[/caption] Sobre su calidad, su resolución compensa su tamaño y está por encima de la mayoría de ordenadores portátiles del mercado, quedando una densidad de píxeles de 247 por pulgada, aceptable en el rango de tablets de alta gama. ¿Dónde está el problema? PenTile. Un PenTile como el que no veíamos desde el Galaxy S III que creíamos muerto y que ha vuelto en el peor momento. Por lo demás, no hay otras quejas. Su representación del color, intervalos de brillo y contraste son más que aceptables para una tablet, no tanto si consideráramos que estamos frente a un ordenador, pero no es el caso. Me ha gustado especialmente su bajísimo brillo mínimo, factor infravalorado a la hora de ver contenido en oscuridad total sin que la luz resulte molesta. Diseño La carcasa trasera del Galaxy Tab Pro es heredera del acabado que estrenó el Galaxy Note 3, con esa imitación característica de piel, pero que no es piel. ¿Es el mejor acabado para una tablet high-end? Ni mucho menos. Pero es suficiente, y mejora lo anterior, así que mi queja no va por aquí. Va por el mismo borde de falso aluminio pintado de siempre, que ya empieza a ser preocupante, sobre todo en dispositivos por encima de los 700 euros. Encima mantiene las vetas a lo largo del marco, por algún motivo que hoy todavía no comprendo. El resto del diseño no está de todo bien logrado, no hay un sentido, no hay coherencia ni armonía. Está pensada para usarse de forma apaisada, y así lo indican la posición del botón de inicio y los dos capacitivos, o la cámara frontal, o el propio logo frontal de Samsung y la cámara trasera. Los altavoces están en los laterales, la salida de auriculares en una esquina superior y el microUSB en el lateral derecho. Y los botones de volumen y el de bloqueo / desbloqueo, en el superior escorados a la izquierda. Y funcionan como sólo lo hacen en las tablets pensadas para el uso apaisado, al revés que todos los smartphones y tablets tradicionales. Manos a la obra Con una tablet tan orientada al entorno corporativo como la Galaxy Tab Pro, no tiene sentido centrarse en los mismos aspectos que a la hora de analizar un Galaxy Note 8.0, un iPad Air o un LG G Pad. Para seguir en la misma línea que la introducción anterior, no he usado esta tablet tanto para navegar, ver películas y series y utilizar juegos y aplicaciones como para lo que es su verdadero core: trabajar. [caption id="attachment_173008" align="aligncenter" width="800"] Aplicaciones nativas de la Galaxy Tab Pro para el ámbito profesional.[/caption] Aunque la he usado con periféricos conectados, también la he usado sin ningún otro añadido para ver cómo se desenvuelve en movilidad (el verdadero sentido de una tablet para trabajar). Y aquí está el primer escollo: el teclado de TouchWiz es muy malo, y en una pantalla tan grande se acentúa. No es una buena idea ponerse a escribir con él. Al fin y al cabo, un teclado táctil tiene como misión universal, para cualquier fabricante, dar un feedback alternativo a quien pulsa sus teclas mediante animaciones y suavidad en el uso. No es este el caso. Es tosco y peca de impreciso si queremos teclear con una mínima velocidad. Y lo que puede parecer gracioso pero en realidad no lo es es que en apaisado, se abre un teclado del tamaño del que tendría un smartphone, haciendo difícil teclear esta vez por lo pequeño de las teclas en una pantalla enorme (para una tablet). [caption id="attachment_173012" align="aligncenter" width="800"] En la foto es bastante cool. En la foto.[/caption] Su software permite aprovechar bastante su tamaño de pantalla y está orientado a su vocación de tablet para uso profesional, empezando por MultiWindow, imprescindible ya, y siguiendo por aplicaciones como... e-Meeting: para realizar reuniones entre compañeros conectados a una misma red y con una tablet Pro de Samsung. Permite intercambiar información sincronizada entre todos, pero su uso queda bastante limitado a quienes sean compañeros de trabajo y tengan esta tablet. Y por supuesto, que quieran usar la aplicación. Remote PC: para controlar un ordenador de forma simultánea. Se sincroniza relativamente rápido y de forma sencilla, pero todo lo que vaya más allá de ver nuestro escritorio será un dolor de cabeza. Especialmente si queremos editar una hoja de cálculo, por ejemplo, con sus pequeñas celdos. Abrir archivos y sobre todo editarlos tendrá más de Pesadilla en Elm Street que de plácida productividad en movilidad. [caption id="attachment_173009" align="aligncenter" width="800"] Remote Pro: mirroring entre MacBook Air y Galaxy Tab Pro vía Wi-Fi.[/caption]##Batería y rendimiento Su batería de 9.500 mAh parecía prometedora sobre el papel, y ha cumplido perfectamente en el día a día. Con un uso muy activo (sin llegar a "intensivo"), dura hasta cinco días sin pasar por el cargador, incluso reproduciendo vídeo en streaming y con todas las conexiones activas. Uno de sus mejores argumentos es su alta autonomía.La parte negativa es el altísimo tiempo de carga. Con el cargador microUSB 3.0 tipo B que trae de serie se puede ir hasta por encima de las 5 horas en una carga completa. Sin él, y con un cargador microUSB estándar, puede llegar hasta las 9 horas. Así que mi consejo es siempre ponerla a cargar la noche anterior a cuando nos pueda hacer falta. Su rendimiento no es frustrante, pero constantemente da la sensación de que todo podría ser algo más rápido y eficiente, más con ese hardware. Desde el tiempo de respuesta de sus teclas (la física y las capacitivas) a la multitarea, que aunque buena peca de lenta. En los benchmarks sí logra mostrarse como una de las tablets Android con mejor desempeño. Pero, y esto es importante, el desempeño real en el uso diario dice mucho más que los números de las gráficas. 4.5Samsung nos vendió estas tablets durante el CES como la solución definitiva para trabajar en movilidad, gracias a tamaños de pantalla generosos en los modelos high-end y al software integrado, tanto en la capa de personalización de Android como en las aplicaciones nativas. Finalmente, Samsung ha creído que las tablets pueden matar del todo a los portátiles, y se ha encargado él mismo de demostrar que no es así. Puede que la Galaxy Tab Pro se lleve algún premio en alguno de esos galardones corporativos de alguna feria de tecnología, porque la democracia es extraña a la par que bella. Pero si lo hace será uno de los más baratos e inmerecidos de los últimos tiempos, porque al final la Tab Pro no es mucho mejor que cualquier otra tablet Android para trabajar, tamaño de pantalla al margen. Y sobre todo, porque existe una opción llamada Microsoft Surface que tendrá sus peros y asteriscos, pero ha demostrado tener madurez para llevar la oficina a cualquier lugar, tanto en hardware como en software. Samsung tiene una cuota monstruosamente alta, así que tiene la victoria, pero el prestigio se lo ha de ganar a pulso mientras haya viento a favor. Con el Note 3 o el Galaxy S5 ha ido dando buenos argumentos, no así en las tablets con la etiqueta Pro. No he encontrado motivos para comprar una Galaxy Tab Pro en lugar de un ultrabook o un convertible, en la misma horquilla de precios y mucho más funcionales. Quizás en próximas versiones Samsung sí logre dar con la tecla para un producto en esta intersección.- Tamaño de pantalla. La experiencia multimedia es mucho más inmersiva con 12.2 pulgadas para películas, vídeos, juegos, etc. Aunque esto implica una contra en tamaño del dispositivo. - Multitarea y multiventana. Nadie como Samsung ha entendido también estos dos conceptos en Android, sólo Microsoft Surface se le puede comparar. - Buena autonomía. Llega hasta cinco días de uso activo.- Software. Es un cúmulo de buenas intenciones mal resueltas. En algunos casos, como el teclado en miniatura, símbolo de no haberse puesto de verdad en la piel del usuario. - Rendimiento y fluidez. En una tablet de casi 600 euros, se espera que el desempeño sea superior. - La gran duda: ¿qué motivo hay para gastar este dinero en esta tablet en lugar de en un ultrabook o un convertible?

Quien ha votado esta historia

Comentarios

No one has commented on this article yet.

Conéctate para comentar o regístrate aquí.